Eutanasia


“Todos tenemos que morir. Pero mi mayor y constante privilegio es poder ahorrar días de tortura. El dolor es el más terrible azote de la humanidad; peor incluso termina muerte”.
Albert Schweitzer 1931


Creo que el derecho a morir significa hacerlo con dignidad, ejerciendo el derecho a recibir cuidados adecuados y proporcionados.

Lectora, lector, el pasado 12 de abril el senador Lázaro Masón Alonso presentó una iniciativa para modificar el código penal, en su artículo 312, que dice así: "el que preste auxilio o y sugiere a otro para que se suicide, será castigado con la pena de uno a cinco años de prisión; si se lo prestaré hasta el punto de ejecutar el mismo la muerte, la prisión será de cuatro a 12 años". Solicita se agregue un párrafo que diría así: " No se aplica la pena alguna para el profesional de la salud que actúe de conformidad con lo dispuesto en la Ley General de Suspensión del Tratamiento Curativo", y propuso además la "Ley General de Suspensión de Tratamiento Curativo" que tiene por objeto garantizar el ejercicio de los pacientes en estado terminal y de toda persona que manifieste su voluntad de que se le aplique la presente por medio de su declaración anticipada.

Los pacientes en estado terminal son a los que se les haya diagnosticado alguna enfermedad terminal, cuyo tratamiento no pueda ser curativo, sino solamente paliativo; y tenga como consecuencia de la enfermedad la muerte, en un lapso no superior a seis meses.

Un derecho señalado es “la suspensión del tratamiento”, quedando prohibida la aplicación, en todas sus formas, a pacientes en estado terminal extranjeros.
Los métodos y procedimientos, así como los fármacos utilizados para la conversión de tratamiento curativo a paliativo, deberá garantizar la disminución del sufrimiento del paciente en estado terminal y, en ningún caso, podrán importar dolores o malestares mayores a los relacionados con el padecimiento.

El paciente en estado terminal podrá designar, de común acuerdo con la secretaría de salud, el comité nacional de bioética médica y los comités de bioética médica, el lugar en el que se aplicarán los tratamientos paliativos.

Esto sólo se podrá llevar a cabo en instituciones de salud del tercer y cuarto nivel, que integran el sector público.
Los pacientes en estado terminal que soliciten la suspensión de tratamiento curativo y que sean atendidos en instituciones de sector privado, serán referidos al establecimiento público que designen la secretaría de salud y el comité nacional de bioética.

La preocupación de que los pacientes en estado terminal no reciban los cuidados paliativos o que no se les proporcionen los medicamentos y cuidados para abatir el dolor ha generado la propuesta de sendas iniciativas, la primera a cargo del diputado Jorge Quintero Bello el 26 de abril de 2007 y la segunda a cargo de un servidor.

El tema de la Eutanasia divide a las naciones. La posición de las personas respecto a la eutanasia está muy marcada por las tradiciones morales.
Para la tradición judío cristiana, la proposición fundamental es que toda vida es sagrada, es algo dado por Dios, por lo que no podemos disponer de ella; de allí la consecuencia normativa de no matar. Los principales argumentos en contra del eutanasia son: la vida es un regalo de Dios y sólo puede ser tomada por Dios; los seres humanos son valiosos porque son hechos a imagen de Dios; todas las vidas humanas son igualmente valiosas; el proceso de morir es espiritualmente importante y no debe ser perturbado.

También se esgrimen otros argumentos en contra del eutanasia que no son de carácter religioso como los siguientes:
  • al aceptar la eutanasia se acepta que algunas vidas son menos valiosas que otras; podría no estar en el mejor interés de un paciente;
  • afecta los derechos de otras personas no sólo los del paciente; un cuidado paliativo o manejo del dolor adecuados la hace innecesaria;
  • permitida conducirá a un cuidado menos riguroso para el enfermo terminal;
  • expone a personas vulnerables a presiones para dar terminó a su vida;
  • es el comienzo de una pendiente resbaladiza que favorece eventuales abusos;
  • da mucho poder a los médicos y por último; no hay una manera de regularla adecuadamente.

Las corrientes filosóficas que sitúan a favor de la eutanasia, pone el acento en evitar el sufrimiento o la autonomía de las personas y sus argumentos son:
  • las personas tienen derecho a decidir cuándo y cómo morir; es cruel e inhumano negar a alguien morir cuando está sufriendo de modo intolerable;
  • la muerte no es una cosa mala, de modo que adelantar la no es malo;
  • debe permitirse cuando está en el mejor interés de todos los involucrados y no viola los derechos de nadie;
  • puede proporcionar un modo costo efectivo de atender personas que están muriendo;
  • y por último, de todos modos ocurre en la práctica, de modo que es preferible que éste regulada.

¿Usted que piensa estimado lector?

1 comentarios :: Eutanasia

  1. Estimado Dip Ramirez Barba:
    El hecho del respeto a mi voluntad de morir con dignidad, sin prolongar una agonía y dolor innnecsarios hacen útil una propuesta como la que analiza en su artículo. No sólo en el acto médico en sí, sino también el aspecto economico de mantener una agonía con recursoros inidpensables para otas vidas recuperables y útiles a si mismos y la sociedad. Felicidades al presidente de la Comisión de Salud al estar atento y receptivo a las inquietudes de la población en temas tan delicados.